Moreno, delgado, ni bajo ni alto y joven. Algunos tienen manías bien
particulares y supongo que visitando a las chicas se curan de ciertos males y
viven sus fantasías privadamente y sin hacer barbaridades.
Este en concreto las buscaba maduritas, cuanto más mayores mejor y tenia
obsesión por alguna en concreto. Cuando el llegaba todas teníamos claro a quien
elegiría y mejor así, yo no diré que no lo habría aceptado aunque no me
entusiasmara su juego pero prefería otros clientes mas “normales”. Entraba
rápido al club y nos examinaba a todas buscando a su “viejecita”, cuando la
encontraba se le iluminaba la cara con una sonrisa entre picara y torcida e iba
a por ella.
Todas sabíamos cual era su juego, algunas lo habíamos jugado. Le decía algo
a su escogida, negociaba rápido el precio y subían a la habitación. La chica se
vestía como una viejecita, con un bolso bien cogido y apretado contra el cuerpo
y caminaba por la habitación mientras el escondido en el armario esperaba su
ocasión. Con la puerta entreabierta observaba como la chica se movía, le
encantaba que pareciera asustada, que apretase mucho el bolso y murmurase alguna cosa mientras caminaba.
Ella paseaba por el poco espacio libre de la habitación, pasando por
delante del armario y esperando algo imprevisto. El observaba como ella se acercaba,
como daba la vuelta y se volvía a alejar…. entonces con su cara tapada abria de
golpe la puerta y saltaba sobre ella arrebatándole el bolso al tiempo que la
sujetaba.
La tiraba sobre la cama y mirando el bolso vacio simulaba un terrible
enfado y se lanzaba sobre la asustada viejecita a la que arrancaba la ropa y
violaba. Disfrutaba imaginado que la chica era presa del pánico y que él la
hacía suya con un ataque de furia.
Después de haberla penetrado, se relajaba, sonreía
satisfecho y si la actuación de la chica había sido buena y creíble pagaba algo
más.
Tengo la duda sin embargo que en realidad las visitas que nos hacía no
fueran más que una especie de entrenamiento para después asaltar a autenticas
viejecitas. Espero que no.
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