miércoles, 6 de mayo de 2015

HABLANDO POR TELEFONO

Lo tenia con su boca pegada a mi pussy, me lamia, besaba…. Resultaba agradable, placentero, excitante. Oí como sonaba el teléfono con la entrada de un mensaje e instintivamente alargé la mano cogiéndolo y mirando de que se trataba.
Al ver quien me escribía sonreí y le conteste pensando en que poco se imaginaria lo yo que estaba haciendo en este momento. Mi siervo levanto su cabeza interrumpiendo su trabajo y dejándome sin el placer que me merecía.
-Tu sigue con eso, no pares - Le ordene y el volvió a hundir su cabeza entre mis piernas y a acariciar con su lengua mi sexo.
De alguna manera me desquitaba de esas otras veces en las que a mi me toca aguantar a tipos que cuando me follan están hablando por teléfono. 
Todavía me acuerdo de uno que pasaba tiempo y tiempo colgado al teléfono hablando con diferentes mujeres mientras yo se la estaba chupando. Solia hablar de las clases de doma a las que se ve que iba con estas mujeres. Y no iba a cualquier hípica sino al mismo club polo de Barcelona. Ese tipo gordo y dejado con pelo siempre sucio que vestía la misma chaqueta todos los días del año y la misma bufanda, incluso en verano. Costaba mucho imaginarlo en ese ambiente, quizás para nosotros las personas normales, tan exquisito. Pero creo que lo peor de aquel tipo no eran sus largas conversaciones sobre caballos ni su patética bufanda, sino sus horribles pies. Tenia unos pies super planos, tan planos que me sorprendía que pudiera andar. Y para adornarlo mas esos enormes pies estaban coronados con unas  enormes y feas uñas, que ademas de  feas tenían un horrible color amarillento y solían oler a queso roquefort, mierda de caballo y yo que se mas. Pues esos pies era lo que el me enseñaba cada vez que nos veíamos y me pedía que los masajeara. Fuuuuu ¡que asco!. Me ponía los guantes para no tocarlos.



No hay comentarios:

Publicar un comentario